viernes, 7 de octubre de 2016

Asi se fundó la Unión Juvenil Cruceñista

Fundación de la Unión Juvenil Cruceñista

Fue el 7 de octubre de 1957

El Capitan José Gil Reyes junto a otros valientes unionistas.
La idea de organizarse como ente movilizador de la lucha cruceña, al margen de la política partidaria, tomó cuerpo. “De entre las emocionadas voces surgió el nombre que había de hacer legendaria a esta agrupación: Se llamaría UNIÓN JUVENIL CRUCEÑISTA”. Corría el mes de octubre de 1957.

Carlos Valverde recuerda: “Preocupado por la tozudez con que el Presidente Siles negaba nuestros derechos y que el apoyo que tenía el Comité Pro Santa Cruz era más que todo teórico y doctrinal con un pequeño grupo de amigos (pues yo era un recién llegado) conversábamos sobre la necesidad de conformar una institución de jóvenes que, aún perteneciendo a cualquiera de las instituciones afiliadas al Comité Pro Santa Cruz, dinamizase sus ideas, pues la lucha hasta esa fecha se estaba convirtiendo en una guerra de comunicados.

Estas charlas se sucedían en la plaza principal „24 de Septiembre‟ y tenían como principales interlocutores a Julio César Cronenbold, Mario Paz Méndez y algunos otros con los que nos reuníamos preocupados por la suerte de nuestro pueblo. Este grupo se fue ampliando y cobrando cuerpo en ocasión del 21 de septiembre en una kermesse realizada en el colegio „Basilio Cuéllar N0. 2‟, a la que asistí con un grupo de la comparsa „Taitas‟. Esta conversación se amplió y otro grupo de jóvenes entre los que se encontraban los hermanos Pareja: Hogier, Pepe y Nancho y otros jóvenes cruceños, que al intercambiar ideas ampliaron el ámbito de aquellos que creíamos en la necesidad de conformar una institución juvenil….

Continúa diciendo que “lo que me decidió a hacerlo se debió al informe presentado por los invitados” a la Mesa Redonda que se reunió con Siles Suazo.
quienes tenían “diferentes concepciones sobre el problema de las regalías petroleras y la solución de las obras públicas básicas de nuestra capital”.

La frondosa delegación cruceña estaba compuesta por la diversidad de instituciones públicas y cívicas del Departamento. De esta manera, con la participación de militantes del partido de gobierno, no pudieron ponerse de acuerdo y presentaron informes por separado.

En una reunión del Comité Pro Santa Cruz el presidente Dr. Melchor Pinto rechazó los informes de la Comisión, en la que la entidad cívica había participado con un solo representante.

“Después de esa reunión, donde no pude hacer uso de la palabra, decidí visitar al Dr. Pinto para plantearle nuestro pensamiento y así lo hicimos: „Toto‟ Cortez Lozada, Julio César Cronenbold, Jorge Landívar y alguien más que no recuerdo…

El Dr. Pinto inmediatamente se dio cuenta de la importancia que tendría para Santa Cruz la creación de la institución que le sugeríamos y estuvo de acuerdo con que procediésemos a su fundación…

Con „Toto‟ Cortez Lozada decidimos poner manos a la obra y compramos un cuaderno empastado y comenzamos a plantear a los que encontrábamos amigos o no, la necesidad que tenía Santa Cruz de esa institución”.

Continúa relatando que para reunir a la juventud y difundir los conceptos de las regalías petroleras decidió convocar a una Conferencia sobre el tema. Invitó al Dr. Dionisio Foianini, como uno de los ideólogos de la Ley de 1938, pero éste prefirió preparar la conferencia para que el joven Valverde la presentara. Fue así que hizo contacto con el dirigente de la FUL Mario Vargas Jordán.
Vista de la Catedral y de la Plaza 24 de septiembre. Año 1957.
Los dirigentes universitarios, con la talla de aquellos de esa época, hicieron las gestiones pertinentes para que se realice la charla en el Salón de los Rectores en el cuarto piso del edificio frente a la plaza.

“Era época de lucha, desde que hablamos con el Dr. Pinto hasta la primera reunión habían pasado pocos días y el 7 de octubre de 1957 nos reunimos en el Salón de los Rectores 63 jóvenes, mi amigo „Toto‟ Cortez me presentó a ellos…”

Y la conferencia se desarrolló. Después de la exposición, dice Valverde: “Todas esas cosas y algunas más hice conocer a los 63 jóvenes entre los cuales había una mujer, Giselle Brunn Sciaroni, que escucharon mi disertación en silencio y cuando expliqué el porqué de esta reunión y que deberíamos formar una institución joven para coadyuvar a la lucha del Comité que exigía cumplimiento de la Ley, no hubo una sola voz contraria a la propuesta.

Cedí la palabra a quien quisiera opinar sobre el tema, inmediatamente comenzaron a pedir la palabra y en forma entusiasta apoyaron la idea, infelizmente no recuerdo quien fue el de la idea de proceder al nombramiento de una mesa directiva Ad hoc que se haga cargo de dar los primeros pasos para hacer efectiva la idea, que fue apoyada sobre tablas” y la directiva quedó conformada por:

Presidente: Carlos Valverde Barbery
Secretario General: Julio „Toto‟ Cortez Lozada
Tesorero: Jorge „Pitungo‟ Landívar Gil.

De acuerdo a los datos proporcionados por el capitán Terrazas en su libro La Unión Juvenil Cruceñista en las luchas cívicas, la elección de la primera directiva unionista tuvo un proceso que pasó por tres elecciones:

La primera: “El 7 de octubre de 1957, reunida la juventud cruceña, sin distinción de clases sociales ni credos políticos, en una extraordinaria concentración en el Paraninfo Universitario, eligió su Directorio ad hoc, constituido por los señores: Carlos Valverde Barbery, Julio Cortez Lozada y Jorge Landívar Gil”. Este comité provisional tenía el mandato de convocar a un Cabildo Abierto de la juventud para elegir un directorio definitivo.

La segunda: “El 24 de octubre de 1957 el Cabildo Abierto se realizó en los salones de la Universidad, habiendo sido elegidas por aclamación, las siguientes personas:

Presidente: Carlos Valverde Barbery; Vicepresidente: Erwin Hénique; Secretario de Relaciones: Julio Cortéz Lozada; Tesorero: Jorge Landívar Gil; Secretario de Defensa: Hugo Pinto Peredo; Secretario de Conflictos: Luis Saucedo Justiniano; Vocales: Oscar Coronado y Osvaldo Parada Achaval”.

Cabe aclarar, a estas alturas de la historia, que el concepto de Cabildo Abierto para los cruceños ha evolucionado, desde el Cabildo Municipal de la Época Colonial, que “abierto” a los vecinos servía para consultar temas de mucha trascendencia. La dimensión de esta apertura estaba sujeta a la voluntad del pueblo, de acuerdo al interés que ponía en cada tema y la convocatoria que poseían las autoridades.

Cuando Terrazas habla de un “Cabildo Abierto” realizado en el Paraninfo Universitario, para la época significaba una gran asamblea abierta a todos los jóvenes que deseaban participar como militantes de la nueva organización.

Como la elección se hizo por aclamación y en forma abierta, dadas las circunstancias que se vivían y el rol que se le pretendía dar a la organización dentro del Comité Pro Santa Cruz, hubo la necesidad de legitimizar el acto eleccionario con una votación secreta que levantó las actas respectivas.

La tercera elección tuvo el siguiente resultado:

Presidente: Carlos Valverde Barbery
Vicepresidente: Cap. José Gil Reyes
Secretario: Dr. Hugo Pinto Peredo
Secretario de Prensa y Propaganda: Juan Rivero Lazcano
Secretario de Hacienda: Guido Gutiérrez Vaca Díez
Vocales: José Terrazas y Hugo Ortega Oyola.

Toda elección tiene su propia dinámica, más aún si se la repite y se la ordena con reglas claras. Todos estos jóvenes, sin duda alguna, tenían como único objetivo servir a su pueblo. De acuerdo a estos datos, el líder indiscutido, que pasó por tres elecciones, fue Carlos Valverde Barbery.

Horas después, en acto solemne, el Presidente del Comité Pro Santa Cruz tomó posesión de la flamante directiva unionista. En su discurso, entre otras cosas dijo:

“La lucha ha comenzado para el pueblo cruceño, que espera de su juventud, toda la lealtad al terruño… todo el sacrificio necesario para otorgarle la paz y tranquilidad que requiere para su desarrollo económico e industrial…” (J. Terrazas).

La naciente organización, dirigida por jóvenes herederos de la centenaria lucha cruceña convocó a “todos los hombres y mujeres de cualquier condición social y edad, que se hallen dispuestos a luchar por su pueblo”. De esta manera, la movilización cruceña en pos de progreso, tenía un nuevo instrumento para el activismo. Los hijos del pueblo habían respondido a la altura de la historia.

“Éramos más de cien, llenábamos dos cuadras”, cuenta Don Arturo Arambel Padilla, quien en ese tiempo se alistó en la Unión Juvenil Cruceñista.


Carlos Valverde reconoce en la persona de Edmundo Gutiérrez Vaca Díez la idea de que la nueva institución cívica se denomine Unión Juvenil Cruceñista. Moción que fue presentada y aprobada en asamblea.

Extractado del Libro Heroes del Civismo Cruceño de Nino Gandarillas Guardia, quien ademas de ser un notable historiador cruceño miembro de la Sociedad de Estudios Historicos y Geograficos de Santa Cruz, fue miembro y Jefe de la Guardia de Honor de nuestra institución.

No hay comentarios:

Publicar un comentario